Mi publicación anterior
"Emprender hoy en día... ¿es una moda, una tendencia, una
necesidad, una actitud o un modo de vida?" me llevó durante la semana a
reflexionar sobre si el emprendedor nace o se hace.
En Noviembre del 2011 me tocó moderar un panel con mis
queridos amigos Arturo Garrido (Twitea.me, @arturogarrido) y César Salazar (500
Startups, @cesarsalazar) en el Congreso El Futuro en tus Manos en Villahermosa,
Tabasco. El panel se llamaba Oportunidades para Emprendedores, y recuerdo que
comencé preguntándole al público asistente quiénes tenían hijos, y de esos, qué
recordaban que sus hijos les habían dicho que querían ser cuando fueran
grandes; las respuestas eran muy clásicas: pilotos, doctores, abogados, etc., pero
nadie recordaba haber oído a sus hijos decir que de grandes querían ser
emprendedores. Y de ahí, les hice la pregunta a Arturo y César: el emprendedor
¿nace o se hace?
Hace pocas semanas lanzamos el libro "Más Allá del
Business Plan" escrito por más de 20 entusiastas que de una u otra forma
participamos en el llamado Ecosistema Emprendedor de nuestro país. En el primer
capítulo titulado El Emprendedor y escrito por Guadalupe Castañeda (Ernst &
Young, @LupitaCastC) se nos plantea esa misma interrogante, y Guadalupe hace
mención de un interesante estudio producido por Ernst & Young en el 2011
"¿Nace o se hace? Decodificar el ADN del emprendedor". Los invito a
visitar el capítulo de nuestro libro y a visitar el informe completo en http://www.ey.com/MX/es/Services/Strategic-Growth-Markets/¿Nace-o-se-hace--Decodificar-el-ADN-del-emprendedor---Esencia-del-emprendedor
. No quisiera repetir los temas que Guadalupe ha tocado en su capítulo, pero si
me gustaría destacar algunos temas extraídos del reporte completo. El informe
menciona 5 hallazgos clave:
1. Los líderes emprendedores se hacen, no nacen.
2. Ser emprendedor pocas veces es una decisión de una sola
vez.
3. El financiamiento, la gente y los conocimientos son las
principales barreras para que los emprendedores alcancen el éxito.
4. Los emprendedores comparten características en común.
5. Las compañías tradicionales pueden aprender de los
líderes emprendedores.
El estudio entrevista a una serie de emprendedores líderes
del mundo, 685 de más de 30 países y 25 sectores, que tomaría con ciertas
reservas porque no creo que refleje la realidad del emprendedor de ecosistemas
como el nuestro, pero, definitivamente es un material a revisar, ya que está
realizado con un rigor metodológico.
Ahora tomo otro documento que en lo personal prefiero, no
con el mismo protocolo metodológico,
pero que nos acerca más al emprendedor innovador mexicano. El estudio se
llama "¿Quiénes son los emprendedores innovadores mexicanos?" y es
producido por Fundación IDEA y con apoyo de la United States Agency for
International Development (USAID) http://www.fundacionidea.org.mx/assets/files/Emprendedores%20Mexicanos.pdf
Quizá lo prefiero porque se me hacen más familiares los emprendedores
entrevistados, de empresas cuyos proyectos me tocó apoyar cuando estuve al
frente de los programas de apoyo del CONACYT, algunas otras que he asesorado e
incluso una donde hoy en día soy inversionista y miembro del Consejo de
Administración. En ese estudio podemos encontrar el género y edad de los emprendedores,
antecedentes personales y familiares, historial educativo, antecedentes
profesionales, el origen y desarrollo de sus innovaciones, así como otros temas
relacionados a ellos, como el perfil del emprendedor mexicano.
Ambos estudios coinciden en un tema y es que emprendedores e
innovadores comienzan a hacerlo en la edad adulta, después de una considerable
experiencia profesional, lo cual nos puede llevar a pensar que el emprendedor
se hace. Sin embargo cuando nos ponemos a pensar en características del
emprendedor también puede ser que las traiga de nacimiento y simplemente las
necesite descubrir, traer a flote, desarrollar, perfeccionar. ¿Qué
características son éstas? constancia, empuje, entusiasmo, compromiso, ilusión,
optimismo, paciencia, orientados a lograr resultados, autoconfianza, y algunas
otras que es muy difícil que encontremos en muchos de nosotros, como el
establecer metas y actuarlas, el ser personas integrales, o educarnos con el
hábito de terminar tareas -o como dice mi buen amigo, el Dr. Carlos Felipe
Muñoz, consultor líder en Colombia en temas del sector salud... (ConsultorSalud,
@consultor_salud) "tener compromiso con los resultados"-.
A algunos les podrá parecer curioso lo que les voy a decir,
pero, eso que antes decíamos que el emprendedor debe tener "tolerancia a
la frustración", más bien tenemos que decir hoy día que debe en parte de
ser un poco masoquista, sabiendo que el fracaso es parte de emprender y de
nosotros depende que ese fracaso sea un aprendizaje o una frustración. Ya lo
dice ese slogan de IDEO "Fail often to succeed sooner". El
emprendedor que se está formando, debe estar preparado para fracasar y más de
una vez, y que entienda que es parte de su formación. Recomiendo ampliamente la
lectura del prólogo de nuestro libro "Más Allá del Business Plan",
escrito por Fernando Fabre (Endeavor, @fabref), quien tiene un muy buen punto
al decirnos que si vamos a emprender, debemos estar preparados para tener más
de un descalabro, pero sin tirarnos a los riesgos sin ton ni son. Se trata de
evitar el fracaso, y en su caso, asimilarlo y superarlo. Pero esto, es también
parte del ADN del emprendedor.
Casi después de todos esos conceptos y pequeña investigación
al respecto, podemos decir que no hay emprendedores natos, se puede tener el
talento para serlo, si... pero como cualquier otro brillante ejecutante de una
disciplina artística, o científica, también se requiere de práctica. Ahí
encontramos otro punto de reflexión. Diseñando con varios amigos un proyecto
que tiene que ver con formación emprendedora, nos encontramos con un sitio
español que es www.emprendekids.com, y que es un programa educativo destinado a
fomentar "La Actitud Emprendedora" en niños de 10 a 16 años.
En nuestro país han habido esfuerzos muy buenos pero para un
eslabón previo en la cadena, es decir en la parte científica. Casos como Innovec
(Innovación en la Enseñanza de la Ciencia, A.C.) que se basa en el modelo de
los Sistemas de Enseñanza Vivencial e Indagatoria de la Ciencia, pero
efectivamente está faltando la cultura emprendedora y desde las etapas más
tempranas, está bien que se despierte la curiosidad del por qué de las cosas,
del descubrimiento, de la investigación, del entendimiento, pero es muy
necesario que también haya un pensamiento creativo, innovador, emprendedor.
Si logramos generar iniciativas de este tipo, que
complementen un ciclo virtuoso de enseñanza-aprendizaje-formación desde las
etapas más tempranas de nuestro sistema educativo, no dudo que llegue pronto el
día en que les podamos preguntar a nuestros hijos... ¿qué quieres ser cuando
seas grande? y la respuesta sea: papá... ¡quiero ser emprendedor! (y no necesariamente hasta que sea grande).